La campaña En Primeur de Burdeos fracasa y pone en entredicho un modelo comercial que necesita reinventarse
La resistencia de los négociants: un cambio de paradigma
La campaña Bordeaux En Primeur 2024 ha evidenciado una crisis profunda en el sistema comercial de los grandes vinos de Burdeos. Por primera vez en años, los négociants se plantan y han aprendido a decir “no”. La tradicional presión por asumir cupos ha desaparecido y los vinos, incluso los más prestigiosos, no han logrado agotar sus existencias.
Stephen Browett, de Farr Vintners (Reino Unido), resume la situación: “Este ha sido el año en que los négociants han aprendido a decir no”. Incluso nombres legendarios como Lafite Rothschild o Les Carmes Haut-Brion no han vendido todo su stock.

Una añada difícil: percepción, calidad y precios a la baja
La añada 2023 en Burdeos, que se vendía este año, llegó marcada por condiciones meteorológicas complicadas: lluvias, podredumbre y una estricta selección de uva, lo que redujo el volumen de producción. Si bien muchos vinos presentan perfiles frescos y accesibles, la percepción general es que se trata de una añada menor, lo que ha enfriado el entusiasmo de compradores e inversores.
Para tratar de reactivar la demanda, algunos châteaux bajaron sus precios hasta un 50 % respecto a 2022. Sin embargo, la estrategia no funcionó del todo. Los compradores perciben poco incentivo en adquirir vinos en primeur que probablemente serán más baratos una vez embotellados.
Fin del crédito fácil: el nuevo obstáculo financiero
Una de las razones del colapso del modelo ha sido el cambio en las condiciones financieras. El modelo tradicional se sustentaba en créditos baratos y acceso a financiación, lo que permitía a los négociants asumir grandes inventarios. Pero con los tipos de interés al alza y los bancos exigiendo reducir líneas de crédito, mantener vino en stock se ha vuelto inviable.
Impacto en productores: desde la élite hasta las bodegas medianas
Mientras algunos grandes productores afirman poder conservar su vino sin problema, otros reconocen dificultades reales para vender. Las bodegas fuera del grupo de élite (primeros crecimientos y super-segundos) son las más afectadas, con márgenes muy ajustados y un mercado que ya no responde como antes.
El resultado: más propiedades en venta, muchas de forma discreta, y un mercado en tensión.
¿Qué futuro espera al vino de Burdeos?
Expertos del sector como Fabrice Bernard (Millésima) apuestan por un cambio en la estrategia:
- Trabajar con restauración y comercio minorista
- Ofrecer vinos por copas a precios razonables
- Invertir en marketing directo al consumidor
- Redefinir las marcas y sus identidades
También se sugiere aumentar el volumen del primer vino para poder bajar precios sin sacrificar imagen, y reconectar con el consumidor real. Durante años, Burdeos ha centrado su estrategia en el lujo y la inversión, pero ha perdido al bebedor habitual, el que abre botellas en casa o en un restaurante.
Conclusión: el modelo En Primeur necesita una reinvención
El fracaso de la campaña Bordeaux En Primeur 2024 confirma que el vino de Burdeos no encuentra comprador como antes. Los négociants han roto con la tradición, el crédito escasea y los consumidores piden valor, autenticidad y conexión real. Burdeos debe dejar de hablarle solo al inversor y volver a enamorar al bebedor.