La Generación X: un grupo olvidado pero poderoso
La Generación X, nacida entre 1965 y 1980, se consolida como el grupo más influyente en la compra de vinos en España y a nivel internacional. Con aproximadamente 12,2 millones de personas en España y un poder adquisitivo creciente, su influencia en la industria vinícola es indiscutible.
Se le conoce como la “Generación Sándwich”, ya que apoya tanto a sus padres como a sus hijos, controlando decisiones clave de compra. Las mujeres de este grupo lideran entre el 70% y el 80% de las decisiones de compra en los hogares, especialmente en productos de alto valor, como los vinos premium.

Hábitos de consumo de vino de la Generación X
A diferencia de Millennials o Generación Z, los miembros de la Generación X no buscan ser pioneros en tendencias, pero sí valoran la calidad sobre la cantidad. Datos de NielsenIQ muestran que:
- El 36% busca probar nuevos productos y mantenerse informado.
- El 60% disfruta comprando productos premium para sí mismos o su familia.
- Prefieren vinos clásicos y regiones reconocidas como Burdeos, Borgoña o Rioja.
En cuanto a la tecnología, esta generación ha integrado herramientas digitales en su vida diaria, usando inteligencia artificial y dispositivos inteligentes para facilitar compras, aunque mantiene cautela en compartir datos personales.
El impacto económico en el sector vinícola
La Generación X representa aproximadamente el 27% del total mundial de ventas de vino, superando a los Baby Boomers en la adquisición de vinos premium. En España, su influencia sobre la distribución y el consumo es clave: más del 60% de las compras digitales de vino provienen de consumidores mayores de 40 años.
Se prevé que entre 2025 y 2035 mantengan esta posición dominante gracias a su estabilidad económica y el incremento patrimonial derivado de herencias, reforzando su interés en vinos finos, coleccionables y experiencias en bodegas.
Estrategias recomendadas para bodegas y distribuidores
El informe recomienda que el sector adapte sus estrategias para atraer a la Generación X:
- Invertir en productos clásicos y de alta calidad: Vinos premium y regiones reconocidas.
- Reforzar programas de fidelización: Beneficios tangibles y experiencias personalizadas.
- Experiencias híbridas: Combinación de presenciales y digitales para visitas, catas y eventos.
El éxito del vino en la próxima década dependerá de cómo se adapten los productos, canales y mensajes a las necesidades y preferencias de esta generación consolidada.
La Generación X será el motor del consumo de vino en los próximos 10 años. Su poder económico, hábitos de compra inteligentes y preferencia por calidad sobre cantidad marcan el camino para un mercado vinícola más estable y rentable. Las bodegas que comprendan y se adapten a sus preferencias estarán mejor posicionadas para liderar el sector en la próxima década.