
Una agricultura que captura carbono: el reto y la oportunidad
Con el cambio climático en el centro del debate agrícola, la viticultura regenerativa se posiciona como una de las soluciones más prometedoras. Así lo ha demostrado el V Simposio de Viticultura Regenerativa, celebrado en el Vinseum de Vilafranca del Penedès, donde se han presentado los últimos avances científicos y técnicos para transformar la agricultura en una actividad climáticamente positiva.
Organizado por la Asociación de Viticultura Regenerativa (AVR) e INNOVI, el evento ha reunido a expertos en captura de carbono, microbiología del suelo y certificación de créditos de carbono, que han coincidido en un mensaje clave: restaurar los suelos es imprescindible para asegurar la salud de los viñedos y la del planeta.

Captura de carbono: la viña como aliada contra el cambio climático
El doctor en Agronomía Luis López Bellido ha abierto el simposio con un dato impactante: el suelo contiene de dos a tres veces más carbono que la atmósfera y la vegetación juntas. Sin embargo, las prácticas intensivas del siglo XX han reducido su capacidad de almacenamiento.
Mediante prácticas regenerativas, cada hectárea cultivada puede capturar entre 0,8 y 4,5 toneladas de CO₂ equivalente al año. Comprender y manejar correctamente el carbono orgánico del suelo no solo mejora la fertilidad, sino que convierte la viña en sumidero de carbono.
Créditos de carbono: una herramienta con gran potencial (y muchos desafíos)
El complejo mercado de los créditos de carbono agrícolas fue analizado por Salvador Samitier, exdirector de la Oficina del Cambio Climático. Un crédito equivale a una tonelada de CO₂ capturada o evitada, pero existen más de 90 metodologías distintas de certificación, lo que genera falta de armonización y fiabilidad.
La estandarización, como resaltaron Samitier y los investigadores del Centro BETA (UVic), será clave para hacer de los créditos una fuente de ingresos estable y verificada para los viticultores. Esto implica evitar la doble contabilidad, respetar criterios ambientales y sociales, y asegurar la permanencia del carbono almacenado.
Prácticas regenerativas: suelo vivo, viñedo resiliente
Los beneficios de una agricultura enfocada en la regeneración del suelo se evidencian también en la salud de los cultivos. Técnicas como:
- Reducción del laboreo
- Eliminación de pesticidas
- Integración de la ganadería
- Uso de cubiertas vegetales
- Aplicación de bioestimulantes
…contribuyen a restaurar el ciclo de nutrientes, mejorar la infiltración del agua y favorecer la actividad microbiológica.
La microbióloga Isabella Tomasi presentó avances sobre el impacto del equilibrio entre pH y potencial redox en la salud de las raíces. Condiciones óptimas (pH entre 7,2-7,5 y redox entre 430-450 mV) estimulan la microbiota beneficiosa, mejoran la resistencia de las plantas y reducen el estrés oxidativo.
Micorrizas y biodiversidad del suelo: el ecosistema invisible del viñedo
La investigadora Amaia Nogales (IRTA) destacó el papel esencial de los hongos micorrízicos, que aumentan la resistencia de las plantas a enfermedades y sequías, mejoran la estructura del suelo y fomentan relaciones simbióticas con bacterias beneficiosas.
Estudios en marcha exploran cómo su inoculación, combinada con cubiertas vegetales, puede regenerar la microbiota del suelo. A su vez, el proyecto Regenera.cat, presentado por Xavier Domene, apunta a mejorar la biodiversidad tanto subterránea como superficial, beneficiando a toda la cadena trófica agrícola.
Manual de buenas prácticas: guía para una transición regenerativa
El simposio culminó con la presentación de un manual de buenas prácticas, elaborado en el marco del proyecto Vitiregenere por el IRTA y Familia Torres. Este documento recopila herramientas, indicadores y estrategias para implementar con éxito la viticultura regenerativa, incluyendo la mejora del secuestro de carbono, la diversidad microbiana y la resiliencia del viñedo.
Una red internacional por un nuevo modelo agrícola
La Asociación de Viticultura Regenerativa, creada en 2021, cuenta hoy con más de 125 socios en 8 países, todos comprometidos con un cambio de paradigma basado en el modelo agrícola más coherente en tiempos de crisis climática.
En colaboración con INNOVI, clúster vitivinícola catalán, promueven la innovación en toda la cadena de valor, posicionando a Cataluña como referente europeo en sostenibilidad vitivinícola.