Un origen basado en la tradición y el conocimiento
La historia de Bodegas Áster es el resultado de un meticuloso proceso de selección de la mejor ubicación para la viña y la bodega. Agricultores locales y expertos en viticultura analizaron diversas subzonas antes de decidirse por Anguix (Burgos) como el enclave ideal.
Desde sus inicios, el proyecto se concibió con la ambición de crear vinos de alta calidad. Durante las primeras seis cosechas, la uva se vendió a otras bodegas. Sin embargo, la primera añada propia de 1999 no alcanzó las expectativas deseadas, por lo que se optó por vender el vino a granel.
No fue hasta el año 2000 cuando, tras comprobar el verdadero potencial de la finca y su uva, se construyó la bodega, equipada con la más avanzada tecnología y con una estética elegante y atemporal. Fue entonces cuando nació el primer vino Áster, reflejo del carácter de la Ribera del Duero.
Un viñedo excepcional en un enclave privilegiado
El viñedo de Bodegas Áster se sitúa a 830 metros sobre el nivel del mar, en los términos municipales de La Horra y Anguix, una zona reconocida por su excepcional calidad vitivinícola.
Con una extensión de 87 hectáreas propias, de las cuales 76 fueron plantadas en 1991, la bodega trabaja con la variedad Tinta del País, la expresión local de la Tempranillo, adaptada a las condiciones climáticas y edafológicas de la región.
El suelo, de composición franco-arcillosa, y el sistema de conducción en espaldera con cordón doble permiten optimizar la maduración de la uva, obteniendo vinos de gran estructura y equilibrio.
La nave de barricas: el corazón de la crianza
Uno de los espacios más impresionantes de Bodegas Áster es su nave de barricas, con capacidad para 4.000 toneles. Actualmente, en este recinto reposan 2.700 barricas de roble, principalmente de origen francés, donde los vinos adquieren complejidad y elegancia antes de su embotellado.
Este proceso de crianza controlada permite que cada vino exprese el carácter único del viñedo, la variedad y la añada, ofreciendo al consumidor una experiencia sensorial inigualable.
Un destino imprescindible para los amantes del vino
Visitar Bodegas Áster es descubrir un proyecto vinícola que combina tradición, conocimiento y tecnología en pleno corazón de la Ribera del Duero (Burgalesa). Su historia, sus viñedos y su impresionante nave de barricas hacen de esta bodega un referente en la producción de vinos de calidad.
Si buscas una experiencia única enológica, esta bodega es una parada obligatoria para los amantes del vino y la cultura vitivinícola.
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