Reconocimiento internacional sin precedentes
El lanzamiento de YJAR 2021 ha supuesto un hito para el vino español. La añada más reciente ha recibido 100 puntos de Jane Anson y James Suckling, además de situarse en el Top 5 de vinos del año según Jane Anson. Luis Gutiérrez, crítico de The Wine Advocate, lo ha descrito como “el mejor Yjar hasta la fecha” con una calificación de 98 puntos.
Este éxito confirma la trayectoria ascendente de YJAR, que en apenas cinco cosechas (2017–2021) se ha consolidado como uno de los vinos más prestigiosos de España y del mundo.
La Place de Bordeaux: escaparate global
YJAR fue el primer vino español en comercializarse en La Place de Bordeaux, el mercado internacional donde se presentan algunos de los grandes vinos del planeta. El lanzamiento de 2021, celebrado el 15 de septiembre, se agotó inmediatamente, reforzando el estatus de YJAR como un vino de culto.
Un terroir singular en Rioja Alavesa
YJAR nace en la Sierra de Toloño (Rioja Alavesa), en un viñedo de apenas 3,8 hectáreas cultivadas orgánicamente. Su ensamblaje combina Tempranillo, Garnacha, Graciano y variedades históricas como la rojal y la granegro, que aportan una identidad única y reflejan el carácter del paisaje riojano.
El vino se elabora con fermentación en pequeños toneles de roble y se cría durante 30 meses en foudres y barricas de distintos tamaños, logrando un equilibrio excepcional entre frescura, elegancia y complejidad.
Las valoraciones de los críticos
- James Suckling – 100 puntos: destaca su elegancia, frescura lineal y perfil sofisticado, con un potencial de guarda extraordinario.
- Jane Anson – 100 puntos: lo describe como un vino energético, preciso y lleno de matices, imposible de olvidar.
- Luis Gutiérrez (Robert Parker’s WA) – 98 puntos: señala que es el Yjar más fino y elegante hasta la fecha, con gran frescura y taninos sedosos.
Un vino de culto español con proyección internacional
En apenas cinco añadas, YJAR ha pasado de ser un proyecto innovador a convertirse en una referencia de prestigio mundial. Su presencia en La Place de Bordeaux y el reconocimiento de los críticos lo consolidan como un icono de Rioja y como uno de los vinos más admirados del panorama internacional.
