Bodega Bestheim alcanza la luna
Bajo el calificativo ‘Cazadores de la luna’ trabajan desde su fundación en la bodega alsaciana con el fin de crear vinos atrevidos y con carácter de los que sentirse orgullosos.
Bestheim es una bodega cooperativa, resultado de las sucesivas fusiones de cinco empresas alsacianas: Bennwihr, Westhalten, Obernai, Sigolsheim y Kientzheim-Kaysersberg. En esta región del noreste de Francia, que limita con Alemania y Suiza, cada pueblo tiene su propia historia. La de Bestheim comenzó en la localidad de Bennwirh, bastión de los famosos ‘Moon Hunters’, hombres atrevidos que siempre soñaron con llegar a lo más alto. Se trata de un apodo que proviene de los albores de los tiempos y que, en la actualidad, describe a todas aquellas personas que se unieron a la bodega y forman parte del proyecto.
¿Su sueño? Ganar la luna, seguir avanzando para crear vinos de los que sentirse orgullosos. Los que hoy se reconocen como ‘Cazadores de la luna’ continúan con la tradición de sus antepasados, inculcando los valores que marcaron la historia de aquellos hombres en la viña alsaciana. Siempre supieron levantarse con determinación y solidaridad. De esta forma desarrollaron una verdadera cultura local, única y auténtica que se actualiza de generación en generación. Al igual que sucede en Bennwihr, las empresas bodegueras de Obernai, Sigolsheim, Westhalten y Kientzheim se han unido al círculo muy cerrado de los ‘Moon Hunters’. Los nuevos embajadores de la marca Bestheim magnifican la excelencia y el carácter de cada terruño. Con Bestheim, ese espíritu se conserva. La Luna y el Sol están presentes y el milagro de la vid se realiza de manera diaria.
Sostenibilidad ambiental
Tras obtener el galardón de Alto Valor Ambiental en 2019, Bestheim obtuvo la certificación hace cinco meses para el 75% de sus terrenos. Son más de 1.100 hectáreas repartidas entre 123 viticultores. Durante los dos próximos años, la firma tiene la intención de continuar con las auditorías de HVE 3 para obtener la certificación para áreas adicionales de viñedos. Para conseguirlo, Bestheim contará con el compromiso de todos los viticultores, de norte a sur de Alsacia, pero también con el apoyo de los servicios de la bodega, incluyendo un equipo dedicado a apoyar a los cooperativistas en la certificación de sus fincas.
«Porque las personas están en el centro de nuestras preocupaciones, porque todos tenemos un papel que desempeñar de cara al futuro, porque es importante encontrar el equilibrio en el que todos podamos prosperar, porque queremos construir juntos, a tu lado. Es parte de nuestros valores porque damos importancia al bienestar. Porque somos una bodega responsable, hemos elegido la transparencia», se puntualiza desde la empresa bodeguera.
Un estilo que combina tradición y modernidad
La adquisición de herramientas de última generación ha permitido a Bestheim conservar al máximo la calidad de sus uvas, mostos, vinos y crémants de la bodega: tanques de acero inoxidable, edificios semi-subterráneos a temperatura autorregulada, luz natural, paneles fotovoltaicos, gestión optimizada de caudales, recuperación de los residuos, entre otras. Más allá de la innovación tecnológica, se trata de la ética que Bestheim pretende implementar: dejar que la uva y el terruño se expresen lo máximo posible en sus caldos.
Los aromas deben expresar la exuberancia de los paisajes de la región de Alsacia, que las sensaciones que sus vinos dejan en boca reflejen la autenticidad, la armonía y la alegría de vivir de este rincón francés. Respetar la tipicidad de cada variedad de uva y de cada terruño es el principal reto de Bestheim, basándose en estrictas normas destinadas a recolectar la vendimia solo en un estado de perfecta madurez del fruto.